lunes, 3 de diciembre de 2012

SISTEMA INFORMATIZADO PARA EL EXAMEN DE CONDUCIR

M. CASTAÑO PARDO, 4-12-12

Algo más de cuatro décadas han pasado, y parece que fue ayer, y ya son cuarenta y dos los años que marcan la supervivencia del Teórico, como vulgarmente se le ha conocido al examen teórico del Permiso de Conducir de la Clase B. Resalto lo de “permiso” porque no se trata de un título vitalicio, sino más bien de una autorización o licencia que en cualquier momento puede retirar la Administración si no se cumple debidamente con el Reglamento de Circulación, como ocurre en la actualidad con el Carné por Puntos.


Pues bien, a lo que pretendemos con el tema de hoy no es resaltar un hecho importante y novedoso, relacionado con ese Examen del Teórico que prevalece desde aquellos tiempos en los que el responsable de realizar la citada prueba era el Ministerio de Industria, con la presencia de la Guardia Civil vigilando la prueba y la técnica de muchos de llevar las respuestas correctas en el lápiz, algo similar a las tablas de multiplicar.
Hacia más de un lustro que se venía rumoreando la posibilidad de que, con el cambio de las nuevas tecnologías se aplicara el nuevo modelo de examen para facilitar la realización del mismo y también para reducir las posibilidades de malas prácticas que algunos propietarios de autoescuelas, faltos de ética y profesionalidad, venían ejerciendo, de forma fraudulenta, para facilitar por la vía rápida y con buenos réditos la obtención de esta licencia.
Como consecuencia de esos intentos de mejora, el sistema informático de evaluación se está poniendo en marcha, de forma gradual. Ya van cinco provincias que han experimentado aplicando este examen que permite realizarlo a través del ordenador, con un cuestionario personalizado y diferente para cada aspirante, sin variar, de momento, el tiempo de 30 minutos, permitir los tres fallos y elegir una de las tres opciones en cada ítem o pregunta.
Pese a la nostalgia y desequilibrio que pueda ocasionar en la ciudadanía, porque incluso los cambios para la mejora siempre desestabilizan,  sin lugar a dudas que va a ser más positivo, cómodo, justo y sin posibilidades de prestarse al copieteo, sin poder traer memorizadas las respuestas y dejar sin posibilidades a quienes proclamaban que el examen se podía preparar en un fin de semana y aprobar sin un solo fallo, incluso sin saber un ápice de castellano. Es posible que las reticencias para realizar la prueba por ordenador, queden resueltas porque: no se necesitan conocimientos informáticos, las pantallas serán táctiles para pulsar la respuesta adecuada con el dedo o el puntero y además se podrá elegir el idioma. Otra de las facilidades es que el alumno podrá comprobar por sí mismo, al cabo de dos horas, el resultado de su examen en la página web de la DGT y en su correo electrónico, aunque la Jefatura de Tráfico seguirá remitiendo los resultados a las autoescuelas que envían los alumnos.
La DGT pretende implantar la medida en el resto del Estado en 2014. Y no está mal este cambio, pero lo ideal y deseable sería que, al igual que ha cambiado el instrumento de evaluación, se animase, de una vez por todas, a reformar el sistema de formación, inicial y permanente, de los conductores y dentro del mismo, el sistema de evaluación, como garantía para mejorar la calidad de los conductores. ¡Esta sí que sería una buena apuesta por y para la Seguridad Vial! Porque, tarde o temprano, las autoescuelas y los alumnos encontrarán la técnica apropiada para aprobar y no para aprender a ser buenos y seguros conductores.

No hay comentarios: