sábado, 30 de marzo de 2013

SITUACIÓN MUNDIAL DE LA SEGURIDAD VIAL



 
 M. CASTAÑO PARDO, 30-03-13
Según este nuevo informe  de la OMS (2013), en todo el mundo mundial, sólo uno de cada siete países tiene leyes integrales relacionadas con  los cinco principales factores de riesgo de sufrir lesiones o muerte por accidentes de tráfico. Da la impresión de que la OMS riza el rizo con el juego de números, porque en realidad lo que quiere decirnos es que de los 193 países existentes (que no reconocidos), tan sólo casi 28 son los que tienen, teóricamente hablando, hechos sus deberes en el tema de la Seguridad Vial y en cinco factores de alto es el riesgo: conducir bajo los efectos del alcohol, el exceso de velocidad, la no utilización del casco, no llevar colocado el cinturón de seguridad o llevar a los niños a granel sin los sistemas de retención correspondientes. Pero estos cinco factores de riesgo, nosotros los españolitos que nos movemos por vías y utilizamos transportes, lo tenemos más que trillado y estamos hartos de que nos lo repitan con tanta frecuencia. Pensamos que esto es tan solo para esos países pobres, desangelados e inexistentes que bastante tiene con lo que tienen como para ponerse a pensar en coches, motos, cascos, cinturones, velocidades y que por no tener, no tendrán ni un poco de alcohol para poder ahogar sus penas.
Mientras la mayor parte de la población sufre los efectos de las lesiones y muertes ocasionados por la falta de normativa en materia de seguridad vial, los pertenecientes al club de privilegiados, nos discutimos el puesto de hornos, pese a que a un buen número de ciudadanos nos importe tres pepinos el tema de la Movilidad Segura y mejorar en los cinco factores de mayor riesgo, porque seguimos incumpliendo las normas, demostrando nuestro incivismo, incrementado la accidentalidad y peleándonos año tras año para que las estadísticas sean ligeramente más bajas que el anterior. Pero en el fondo poco va cambiando.
Es posible que el tarro de las esencias para la seguridad estribe en la educación de los ciudadanos, sobre todo, en los países más pobres y olvidados; porque, posiblemente sus factores de riesgo nada tienen que ver con los vehículos, que ni conocen o jamás podrán tener ocasión de poseerlos. Por eso, en los países desarrollados se necesita voluntad política al más alto nivel de gobierno para conseguir esta legislación vial y para los emergentes inversión en educación y cubrir las necesidades básicas, pues para la mayoría de ellos, su esfuerzo ha de estar centrado en la lucha contra otros enemigos de la salud y los aliados de la muerte que nada tiene que ver con el tráfico.
En consecuencia, si parece lógico pensar que las leyes educativas y viales si pueden ser herramientas adecuadas para invertir la tendencia de siniestralidad al alza para el año 2020.
Pero, curiosamente, pese a todo, si los ciudadanos no asumimos la responsabilidad compartida y el compromiso, no merecerá la pena el intento. Todo quedará en el olvido si nos oponemos a la reducción de la velocidad, si seguimos bebiendo cuando conducimos, si nos resulta caro o molesto usar el casco y si nos olvidamos de poner el cinturón o de sujetar con seguridad a nuestros hijos. Pues como dice la Directora General de la OMS, Dra. Margaret Chan: «Si no conseguimos esto, las familias y las comunidades seguirán llorando la pérdida de sus seres queridos, y los sistemas de salud seguirán teniendo que hacer frente a la carga que supone la atención a las lesiones». Lo previsible es que de no aplicarse medidas adecuadas, en el 2020 sumaremos casi dos millones de muertes por accidentes de tráfico.

sábado, 23 de marzo de 2013

PEGASUS SE ESTRENA EN LA OPERACIÓN DE SEMANA SANTA.

M. CASTAÑO PARDO. 23-03-113
Un año más, la Semana Santa se introduce en la rutina cronológica del calendario. Esto implica ventajas, inconvenientes, compromisos, desesperanzas o posibilidades. Dependiendo de las expectativas, crisis o formas de ver y afrontar la vida, es posible que para unos esté asocie al tema religioso, para otros al turístico y cultural como alternativa para la descarga psicológica y física. Pero, posiblemente, para un buen número de ciudadanos, acuciados y acogotados por la crisis, se vean limitados, resignados o creativos para poder encontrar algún modo de olvidar esta pesadilla (aunque sólo sea por unos días) y poder soñar con esperanza de superarla.
Con todas estas situaciones personales, parece ser que los españoles nos resistimos a quedar en casa y que vamos a tratar de reinventar el transcurrir unos días de asueto, ya que, según datos de la DGT, unos 13 millones de vehículos se desplazarán en estos días.
Por este motivo, se ha montado la correspondiente Campaña de Semana Santa, expuesta en el amplio dossier que se nos ofrece con todo detalle, y que sería bueno que le dedicásemos un ratito par conocerlo al detalle en www.dgt.es.
Por si los hubiera faltos de tiempo, en este artículo reflejo algunas pinceladas. Vamos a estar bien vigilados y asistidos en carretera con los diez mil agentes y unos cuanto helicópteros, entre los cuales el protagonista será “Pegasus”. Con su alta tecnología y ojo avizor, será capaz de sobrevolar cuantiosas carreteras en poco tiempo, sobre todo las secundarias, para medir la velocidad de los vehículos a una altura de 300 metros y en una distancia de un kilómetro y seguro que con una nitidez de imagen. Decía la Directora General que “este helicóptero solamente va a `pillar a quien infrinja y que, por lo tanto, los demás estaremos tranquilos y seguros”. Así pues, uno puede deducir que este caballo alado es un servicio público y como tal, cada cual será libre para solicitar su servicio o no. Pero, por si las moscas, cuidadín, cuidadín con la velocidad, porque, al parecer, incluso se camufla perfectamente ante cualquier detector de radar.
Ante tal artilugio, uno quiere ver el carácter preventivo y disuasorio, pues si es para favorecer la Seguridad Vial, bienvenido sea. Por eso, quedamos a la espera de que, pese a las críticas de los usuarios, no le ocurra lo que al héroe Belerofonte, que si bien sobre los lomos del alado equino logró dar muerte a la Quimera y vencer a las amazonas, no se le vuelva la ambición en su contra y pueda ser castigado por el desprecio de la ciudadanía amparada por la visión recaudatoria del invento.
Cierto es, que como en todas las salidas masivas, para la circulación de vehículos por la red viaria española, son las fechas más conflictivas del año, Pegasus ha logrado acapara la atención de todos para concienciarnos de que la velocidad incontrolada mata.
Por todo ello, la Dirección General de Tráfico pone en marcha una serie de medidas de regulación, ordenación y vigilancia del tráfico bajo el contenido de la Operación Especial de “SEMANA SANTA - 2013”,
Nos recuerda también que el 78% de los fallecidos en accidentes ocurre en las carreteras secundarias y de ahí la necesidad de poner mucha atención y cuidado cuando se conduce por estas vías. No estaría nada mal que todos echásemos un vistazo al contenido de esta campaña, para recordar y tratar de ponerlo en práctica como un acto de responsabilidad compartida para la Movilidad Segura. Ten el coche a punto, siempre el cinturón y el casco, ojito con el alcohol, cuida la velocidad y olvídate de Pegasus. Porque la seguridad es lo primero y lo importante no es dónde vamos, sino cómo llegamos. ¡Felices vacaciones, a disfrutar lo que se pueda y feliz retorno!


NUEVO INFORME DE LA OMS 2013. Resumen y nota de prensa

Un nuevo informe indica que solo uno de cada siete países tiene leyes integrales sobre los cinco principales factores de riesgo de lesión y muerte por accidentes de tránsito


14 de marzo de 2013
Ginebra - Solo 28 países, que representan el 7% de la población mundial, tienen leyes integrales de seguridad vial sobre los cinco principales factores de riesgo: conducción bajo los efectos del alcohol, exceso de velocidad y no utilización del casco, del cinturón de seguridad y de sistemas de retención para niños.
 http://www.who.int/violence_injury_prevention/road_safety_status/report/es/index.html
Según el Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013: apoyo al decenio de acción, publicado hoy por la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay que acelerar el ritmo de los cambios legislativos si se quiere reducir sustancialmente el número de muertes por accidentes de tránsito.
«Se necesita voluntad política al más alto nivel de gobierno para conseguir una legislación adecuada sobre la seguridad vial y una estricta observancia de esas leyes por parte de todos»
Dra. Margaret Chan, Directora General de la OMS
En 2010 hubo en todo el mundo 1,24 millones de muertes por accidentes de tránsito, cifra similar a la de 2007. El informe muestra que el número de esas muertes se ha conseguido reducir en 88 Estados Miembros, pero que en otros 87 ha aumentado.
La clave para reducir la mortalidad causada por el tránsito es conseguir que el mayor número posible de Estados Miembros tengan en vigor leyes que abarquen los cinco principales factores de riesgo antes mencionados. El informe destaca que:

59 países (39% de la población mundial) han limitado la velocidad en centros urbanos a 50 km/h, o menos, y permiten que las autoridades locales reduzcan aún más ese límite.

89 países (66% de la población mundial) tienen leyes integrales sobre la conducción bajo los efectos del alcohol y establecen la alcoholemia máxima permitida en 0,05 g/dl.

90 países (77% de la población mundial) tienen leyes sobre el uso del casco por los motociclistas que abarcan a todos los tipos de vías públicas y de motores, y disponen asimismo de normas para la homologación de los cascos.

111 países (69% de la población mundial) tienen leyes integrales sobre el uso del cinturón de seguridad que se aplican a todos los ocupantes del vehículo.

96 países (32% de la población mundial) tienen leyes que exigen el uso de sistemas de retención para niños.

El informe también destaca que la mayoría de los países — incluso algunos de los que disponen de los mejores niveles de seguridad vial — señalan que la observancia de esas leyes es insuficiente.
«Se necesita voluntad política al más alto nivel de gobierno para conseguir una legislación adecuada sobre la seguridad vial y una estricta observancia de esas leyes por parte de todos», ha dicho la Directora General de la OMS, Dra. Margaret Chan. «Si no conseguimos esto, las familias y las comunidades seguirán llorando la pérdida de sus seres queridos, y los sistemas de salud seguirán teniendo que hacer frente a la carga que supone la atención a las lesiones y discapacidades ocasionadas por los accidentes de tránsito.»
«El Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013 es una clara advertencia a los gobiernos de que queda mucho por hacer para proteger a los usuarios de las vías públicas», ha dicho el Sr. Michael R. Bloomberg, filántropo y alcalde de la ciudad de Nueva York, cuya fundación ha financiado el informe. «Las muertes y las lesiones por accidentes de tránsito son prevenibles. Este informe supone un importante paso para lograr la seguridad de los peatones, ciclistas y motoristas en todo el mundo. Demuestra que estamos avanzando, pero que todavía queda mucho por hacer.»
Hay varios grupos que corren un riesgo particularmente elevado de morir en un accidente de tránsito:
El 59% de los fallecidos en accidentes de tránsito tienen entre 15 y 44 años, y el 77% son del sexo masculino.
Los peatones y ciclistas representan el 27% de las muertes por accidentes de tránsito. En algunos países esta cifra supera el 75%, lo cual refleja decenios de desatención a las necesidades de estos usuarios de la vía pública en las actuales políticas de transporte, centradas en el transporte motorizado.
El mayor riesgo de fallecer a consecuencia de lesiones causadas por el tránsito corresponde a la Región de África de la OMS (24,1 por 100 000 habitantes), y el menor a la Región de Europa de la OMS (10,3 por 100 000 habitantes).
Este informe es el segundo de una serie en la que se analiza la aplicación por los países de una serie de medidas eficaces de seguridad vial. Además de los cinco factores de riesgo señalados con anterioridad, destaca la importancia de temas como las normas sobre la seguridad de los vehículos, las inspecciones de la infraestructura viaria, las políticas sobre los desplazamientos a pie y en bicicleta o los sistemas de atención prehospitalaria. Asimismo señala si los países disponen de una estrategia nacional que establezca metas medibles para reducir el número de muertes y lesiones graves por accidentes de tránsito.

En el Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013 se presenta información procedente de 182 países que representan casi un 99% de la población mundial (6800 millones de personas). Se utiliza un método normalizado que permite efectuar comparaciones entre los países. Además del texto principal, contiene perfiles de una página de cada uno de los países, y un anexo estadístico.
«El Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020 es una oportunidad fantástica que no se puede desperdiciar», ha dicho el Dr. Etienne Krug, Director del Departamento de Prevención de la Violencia y los Traumatismos y Discapacidad de la OMS. «El Informe sobre la situación mundial de la seguridad vial 2013 nos proporciona la información que necesitamos para seguir los progresos realizados. Tenemos que aunar fuerzas para conseguir que se cumpla el objetivo del Decenio de Acción de salvar cinco millones de vidas.»

El Decenio de Acción, dispuesto por la Asamblea General de las Naciones Unidas, es una oportunidad histórica para que los países detengan e inviertan la tendencia que nos lleva a predecir alrededor de 1,9 millones de muertes anuales para el año 2020 si no se toman medidas. Lanzado el 11 de mayo de 2011 por gobiernos de todo el mundo, el Decenio de Acción trata de crear capacidad de gestión de la seguridad vial en los países, de mejorar la seguridad de las carreteras y los vehículos, de mejorar el comportamiento de todos los usuarios de las vías públicas, y de fortalecer la atención a los accidentados. En el contexto del Decenio de Acción, la OMS presta su apoyo en todas estas áreas, en particular a través del Proyecto de Seguridad Vial en 10 países (RS10), que, en colaboración con otros asociados, proporciona orientación técnica en materia de legislación, observancia de las leyes, campañas mediáticas, recopilación de datos y asistencia a los accidentados.
Para más información puede ponerse en contacto con:
Laura Sminkey
OMS, Ginebra
Telephone: +41 22 791 4547
Móvil: +41 79 249 3520
Correo electrónico: sminkeyl@who.int



lunes, 18 de marzo de 2013

Tercer INFORME DE LA OMS (2013), sobre el progreso de la década de acción sobre las lesiones por accidentes de tráfico.

Os paso algunos links sobre este informe de la OMS, recién salidito del horno.  Estimo que pueda ser una herramienta apropiada de análsis y de alternativas para seguir mejorando los resultados. Es bueno que sigamos SUMANDO para poder RESTAR las secuelas de los acidents/siniestros ocasionados por  el tráfico.

1.http://www.who.int/violence_injury_prevention/road_safety_status/2013/facts/spanish/en/index.html

2. RESUMEN EN ESPAÑOL: http://www.who.int/violence_injury_prevention/road_safety_status/2013/report/summary_es.pdf

domingo, 17 de marzo de 2013

PRESCRIPTORES SOCIALES EN LA MOVILIDAD SEGURA




Ocho meses sin permiso de conducir y  18.000 euros de sanción.
M. Castaño, 17-03-13 
No es la primera ni la última vez que abordaremos este tema de máxima importancia social y vial. Los numerosos incidentes en fechas recientes no son un caso aislado, como los de corrupción o desvío de capital a los paraísos fiscales. ¡Estamos rodeados de ciudadanos infractores que quieren ser diferentes a los demás y a las normas, cuando lo ideal y ético es que, por ser quienes son y el calado social que tienen, deberías ser unos modelos  a seguir. La lista de celebridades con infracciones viales graves se multiplica y nada más hace falta tirar de la memoria, recurrir a las hemerotecas o cualquier buscador de internet para insertar en el archivo a futbolistas, toreros, cantantes, políticos… que pisan demasiado el acelerador,  que empinan el codo de alcohol o coquetean con las drogas, que no circulan sin el cinturón o el casco, que llevan a sus hijos sin los sistemas de retención o en su regazo, que cruzan en rojo o fuera de los pasos peatonales, que conducen sin permiso o con los puntos caducados, que llevan el coche con el brazo o pié escayolado… Es tan larga la lista de modelos infractores y tan graves las faltas que comenten, que, he decidido obviar los nombre para exponer la razón fundamental de mi mensaje: quienes tienen relevancia en la vida social, política y religiosa, no sólo tienen que dar ejemplo. Porque, por su posición y referencia, además de ser honestos, deben parecerlo y predicar con el buen ejemplo. Una sociedad sin referentes éticos y morales, sin modelos y líderes a imitar, sin referentes positivos, es una sociedad en deterioro y decadencia, porque nuestros prójimos, los que están a nuestro lado, sobre todo los más pequeños, necesitan tener paradigmas para no perder el norte y llegar a la conclusión de que todo vale, y que además, suelan quedar inmunes  o sancionados a la baja.
Ortega Cano triplicaba la tasa de alcoholemia
Pero lo que me duele y alarma es que la justicia actúe de forma relajada y, sobre todo, que los propios ciudadanos no sancionen o, incluso, apoyen y refuercen esas conductas y acciones disruptivas. Porque cuando hay actuaciones graves contra la norma, la salud e incluso la vida, tenemos que ser muy duros y reclamar la tolerancia cero, en vez de tratar de justificar como un error humano o con matices personales. No es válido justificar las actuaciones de los modelos negativos. No es deseable potenciar estas actitudes y falta de valores. Lo positivo es pedir que estos prescriptores sean un punto de referencia, sobre todo para los más pequeños. ¿Por qué todos entendemos y apoyamos que la DGT sancione a cinco conductores de transporte escolar por ir borrachos y nos dividimos en opiniones y sanciones cuando se trata de un futbolista que supera los 200Km/h o un torero que conduce ebrio? ¿A caso tenemos diferentes raseros cuando y juzgamos a los famosos somos tolerantes y partidistas justificando lo injustificable, olvidando la gravedad de los hechos?
En este sentido, recordaba la decisión del fiscal que, actuando con rigor, mandaba a la cárcel a tres responsables políticos que habían cometido malversación de fondos, basando su argumentación en que deberían ser un ejemplo de honradez para que a nadie se le ocurriera pensar que este tipo de delitos quedarían impones o pactados a la carta. No estaría nada mal que ante las infracciones viales, quienes tiene más dinero y más calado social fuesen tratados con más rigor para que también cunda el pánico y el exterminio de los falsos modelos socioviales. Por eso me ha gustado la sanción impuesta a Benzema y el cariz que está teniendo el juicio contra Ortega Cano.

jueves, 14 de marzo de 2013

Nueva reglamentación para el uso de bicicleta


JAVIER  GARCÍA (Colaboración). 14-03-13

En los últimos 20 años el tráfico vehicular se ha intensificado significativamente y las ciudades españolas no son la excepción. Las normativas en materia de seguridad vial, han tenido que reestructurarse con la finalidad de garantizar la seguridad de las personas y mantener un orden.
Dentro de este contexto, las bicicletas y los ciclistas también son un punto muy importante. Es por ello que desde hace varios meses, se ha estado hablando sobre la reforma del Reglamento General de la Circulación. De esta forma se pretende fomentar los medios de transporte sostenibles.
¿De qué tratan las reformas? Los ciclistas tendrán un título exclusivo dedicado al uso de la bicicleta. Se detallan las diferentes obligaciones en el uso de la bicicleta, con el propósito de mejorar su visibilidad y su posición en las vías públicas, así como también la velocidad de circulación, el transporte de personas y carga y la regulación de las infracciones.
En el Reglamento actual, la posición de las bicicletas mantiene el principio de hacerlas circular, preferentemente por la parte más alejada del tráfico motorizado. Es posible que en el nuevo texto, el ciclista sea considerado como un peatón con ruedas y dependiendo de en qué ámbitos se circule, la calzada puede presentar serios riesgos.
Es factible que se abogue por la segregación de los diferentes tráficos: el peatonal, el motorizado y el tráfico ciclista.
En lo que concierne a la visibilidad de las bicicletas, hoy en día los ciclistas deben llevar luces encendidas y una prenda reflectante con visibilidad a 150 metros de distancia de noche o en condiciones meteorológicas o ambientales que disminuyan sensiblemente la visibilidad.
La velocidad de circulación de las bicicletas es también un tema delicado, ya que las bicicletas de momento no están dotadas de velocímetro. Actualmente, su velocidad máxima por ley es de 45 km/h.
En lo que sí que hay algo más de “luz” es en el transporte de personas y carga, un punto que quedaba pendiente a posteriori de la incorporación de los remolques para bicicletas. La ley, no permite transportar personas en estos remolques, pero en contrapartida, se admite que en ciudad se esté a lo dispuesto en las ordenanzas municipales. Un sinsentido que muy probablemente sea eliminado.

sábado, 9 de marzo de 2013

REGLAMENTO DE CIRCULACIÓN EN VÍAS URBANAS E INTERURBANAS (Borrador)


Manuel CASTAÑO PARDO, 9-03-12
 
Ante la abundancia de noticias, opiniones, reacciones y posicionamientos  de la ciudadanía, surgidos por el borrador del nuevo Reglamento de Circulación, no he tenido más remedio que dejar en el cajón el artículo previsto para esta semana y sustituirlo por lo que en verdad procede y es novedoso, pues no en vano, la prensa debe estar acorde con el ritmo de opinión de los lectores porque, como se resalta en las primera líneas de este borrador reglamentario, los cambios de las normas viales son el mejor indicador de la evolución de la sociedad en el uso de los espacios compartidos en las vías como peatones, viajeros o conductor. Pero mucho me temo, que según vox populi, reflejada en las copiosas noticias en los medios de comunicación y el hervidero de los foros de opinión de la red, las opiniones y posturas  de los  ciudadanos no van en la misma línea que dibuja el pensamiento de la Administración.
El principio homeostático, frente a un nuevo cambio, siempre produce acciones y reacciones de inestabilidad  que buscan el equilibrio entre las necesidades y la propia satisfacción de lo propuesto. Y si esto ocurre a nivel personal, imaginemos lo que puede sea nivel social.
Es posible, que por este motivo, ante la propuesta de cambio, que nos afecta y debería incluir a todos, ciertos partidos políticos, algunas asociaciones  y muchos ciudadanos de a pié dejen verter su desacuerdo total o parcial, argumentado o interesado, frente a determinadas nuevas normas. Y es bueno que la opinión fluya y, como tal, sea de diferente calado y posición. Pero con frecuencia, solemos olvidarnos de contrastarla con la argumentarla con la normativa, el razonamiento y la búsqueda del bien colectivo sobre el individual, lo que implica ceder algo de nuestro posicionamiento o punto de vista ventajoso, porque casi siempre, desde una vertiente maquiavélica,  lo que merece la pena es el fin perseguido, aunque no coincidamos en todo con los medios  y, a veces,  tengamos que renunciar a alguna de las partes.
Me llama la atención que la plebe se subleve ante acontecimientos como éste que lo que persigue es prevenir la siniestralidad y la convivencia entre los usuarios de las vías y, por el contrario, que sea tan pasota frente a las estadísticas y noticias de muertos y heridos en accidente. ¿Qué predomina en esta postura, los intereses personales o el bien común?
Que la velocidad cuanto mayor sea , más peligros encierra, nadie lo pone en duda. Pero seamos coherentes. Los unos protestan porque se va a permitir conducir a 130.Km.h en ciertos tramos de autopista y autovía regulados, según las circunstancias, con señales luminosas ya que la velocidad mata. Los otros afilan cuchillos porque se va a reducir la velocidad en las vías urbanas o en las carreteras secundarias y argumentan que estas medidas van a ir en contra de la fluidez, que van a favorecer los atascos y problemas de convivencia o que simplemente lo que persiguen es incrementar las sanciones y en consecuencia la recaudación. ¡Pongámonos de acuerdo o al menos no seamos tan extremistas o faltos de serias argumentaciones!
Pese a todo, veo bien que el cinturón de seguridad sea obligatoria para todos, porque en ello nos va la salud y la vida y también es acertado y justificado que los menores de dieciocho kilos de peso vayan con la sillita en sentido contrario a la velocidad.
Una de las cosas que me sorprende, frente a las argumentaciones dadas por las asociaciones que los representan, es que los ciclistas reivindiquen no llevar el casco en las ciudades porque es molesto, impide la visibilidad, porque la velocidad del ciclista no sea elevada o seamos el único país europeo en llevarlo. ¡La cabeza es como un cascarón de huevo que con poquito golpe produce grandes  y severos desperfectos!
Pese a todo lo expuesto, y sin ánimo de convencer a nadie que previamente no esté autocenvencido, estimo que lo sustancial y lo que nos debe unir es la Movilidad y la Seguridad Vial de todos. En este sentido, apuesto por los nuevos cambios en general, para que podamos tener espacios viales bien definidos, compartidos y seguros que hay que considerarlos como un bien escaso que debemos aprender a compartir

martes, 5 de marzo de 2013

EL PELIGRO DE LAS DISTRACCIONES CUANDO CONDUCES




No te la juegues por ir despistado. Basta un momento para terminar con tus proyectos o con los que encuentras a tu lado. Conducir debe ser un acto de empatía y de responsabilidad compartida. En ello nos va la salud, la vida. ¡Llamar o recibir una noticia por teléfono pued esperar!

domingo, 3 de marzo de 2013

APOSTOLADO EN CARRETERA Y EMPATÍA EN LOS USUARIOS

Manuel CASTAÑO PARDO, 3-03-13

El fin de semana pasado, la Diócesis de Salamanca celebró las Jornadas de responsabilidad vial, con el lema de “La humanidad y los valores humanos”, bajo la dirección de Gabino Martín como Delegado del Apostolado en Carretera y la participación como conferenciante de María Seguí (Directora General de Tráfico).
En primer lugar, es de agradecer que la Diócesis se implique dentro de la responsabilidad compartida por la sociedad en la búsqueda de soluciones a los accidentes de tráfico y sus secuelas y además, porque su perspectiva religiosa transciende a la base humana de la que se deriva el mayor porcentaje de la siniestralidad y las mayores esperanzas de ser reducidas con intervenciones preventivas sobre todos los usuarios y con la participación activa de todos los ámbitos y estamentos sociopolíticos y religiosos.
Imagen del bolg de auoteseucals.com

También me da pié para conocer un poco más esta parcela diocesana, centrada en el apostolado sobre los cristianos y el uso de la carretera. Y para no errar ni un ápice en su contenido, he bebido de la Web de la Conferencia Episcopal Española en la que se resalta que “la Pastoral de la Carretera es un servicio que la Iglesia ofrece para alentar el anuncio y la vivencia de la fe cristiana de los profesionales, conductores, peatones y viajeros, en el uso de la vía pública y de los vehículos, que están generando una nueva forma de convivencia y de relaciones humanas. En toda esta tarea como en el ejercicio de cualquier actividad y derecho ciudadano, el primer principio que debe orientar la actuación de toda persona es el sentido de responsabilidad. Toda la moral del tráfico se fundamenta en el valor cristiano de la persona humana, “que está por encima de las cosas todas y cuyos derechos y deberes son universales e inviolables”.
Según la base eclesial de este servicio apostólico que hemos citado, no es de extrañar que los referentes sean el evangelio y los valores deseables para todos los cristianos, usuarios de las vías y de los vehículos, que bien podían ser extrapolables a cualquier ser humano, ya que incide en esos principios morales y esa ética mínima, centrados en el humanismo, en la convivencia, en las relaciones humanas y en la responsabilidad.
Por lo dicho anteriormente, no me extrañó nada que María Seguí orientase su intervención teniendo como eje de su discurso el factor humano y su incidencia negativa como el causante mayor de la siniestralidad y, por otra parte, su aportación positiva en cuanto agentes activos y participativos implicados en la prevención y solución de los problemas viales, poniendo como bandera ese humanismo liderado por la empatía que desarrolle valores y actitudes adecuados.
La empatía que identifica la inteligencia intelectual y la emocional con los sentimientos, pensamientos, actitudes y comportamientos de los otros. Término que la Directora General de Tráfico fue desgranando y llevando al territorio de la vialidad y de la humanidad empática de todos los usuarios de las vías. Por eso, insistía en que en el tráfico todos vamos al lado de todos y, en consecuencia, la solución pasa por la implicación responsable de todos y será mucho más fácil y rentable si pensamos, comprendemos y convivimos con los demás. En esa comunicación fluida y directa, fue esbozando su mensaje para propiciar esa empatía, porque en la carretera  como en la vida todos estamos conectados y si el problema está en las personas, la solución ha de venir de ellas. Terminaría uniendo lo humano con lo evangélico, sintetizando los principios y fines empáticos con el no hagas a los otros lo que no deseas para ti, porque en definitiva, tanto el mal como el bien que producimos revierte en quien lo genera. Sintetizó con una frase que nos lleva a la reflexión, a la empatía y al compromiso: “se necesita muy poca energía para batir un huevo y toda la ciencia del mundo no es capaz de recomponerlo”.

POSTOLADO EN CARRETERA Y EMPATÍA EN LOS USUARIOS

MANUEL CASTAÑO PARDO, 3-03.13

El fin de semana pasado, la Diócesis de Salamanca celebró las Jornadas de responsabilidad vial, con el lema de “La humanidad y los valores humanos”, bajo la dirección de Gabino Martín como Delegado del Apostolado en Carretera y la participación como conferenciante de María Seguí (Directora General de Tráfico).
En primer lugar, es de agradecer que la Diócesis se implique dentro de la responsabilidad compartida por la sociedad en la búsqueda de soluciones a los accidentes de tráfico y sus secuelas y además, porque su perspectiva religiosa transciende a la base humana de la que se deriva el mayor porcentaje de la siniestralidad y las mayores esperanzas de ser reducidas con intervenciones preventivas sobre todos los usuarios y con la participación activa de todos los ámbitos y estamentos sociopolíticos y religiosos.
Imagen del blog de autoescuelas.com
También me da pié para conocer un poco más esta parcela diocesana, centrada en el apostolado sobre los cristianos y el uso de la carretera. Y para no errar ni un ápice en su contenido, he bebido de la Web de la Conferencia Episcopal Española en la que se resalta que “la Pastoral de la Carretera es un servicio que la Iglesia ofrece para alentar el anuncio y la vivencia de la fe cristiana de los profesionales, conductores, peatones y viajeros, en el uso de la vía pública y de los vehículos, que están generando una nueva forma de convivencia y de relaciones humanas. En toda esta tarea como en el ejercicio de cualquier actividad y derecho ciudadano, el primer principio que debe orientar la actuación de toda persona es el sentido de responsabilidad. Toda la moral del tráfico se fundamenta en el valor cristiano de la persona humana, “que está por encima de las cosas todas y cuyos derechos y deberes son universales e inviolables”.
Según la base eclesial de este servicio apostólico que hemos citado, no es de extrañar que los referentes sean el evangelio y los valores deseables para todos los cristianos, usuarios de las vías y de los vehículos, que bien podían ser extrapolables a cualquier ser humano, ya que incide en esos principios morales y esa ética mínima, centrados en el humanismo, en la convivencia, en las relaciones humanas y en la responsabilidad.
Por lo dicho anteriormente, no me extrañó nada que María Seguí orientase su intervención teniendo como eje de su discurso el factor humano y su incidencia negativa como el causante mayor de la siniestralidad y, por otra parte, su aportación positiva en cuanto agentes activos y participativos implicados en la prevención y solución de los problemas viales, poniendo como bandera ese humanismo liderado por la empatía que desarrolle valores y actitudes adecuados.
La empatía que identifica la inteligencia intelectual y la emocional con los sentimientos, pensamientos, actitudes y comportamientos de los otros. Término que la Directora General de Tráfico fue desgranando y llevando al territorio de la vialidad y de la humanidad empática de todos los usuarios de las vías. Por eso, insistía en que en el tráfico todos vamos al lado de todos y, en consecuencia, la solución pasa por la implicación responsable de todos y será mucho más fácil y rentable si pensamos, comprendemos y convivimos con los demás. En esa comunicación fluida y directa, fue esbozando su mensaje para propiciar esa empatía, porque en la carretera  como en la vida todos estamos conectados y si el problema está en las personas, la solución ha de venir de ellas. Terminaría uniendo lo humano con lo evangélico, sintetizando los principios y fines empáticos con el no hagas a los otros lo que no deseas para ti, porque en definitiva, tanto el mal como el bien que producimos revierte en quien lo genera. Sintetizó con una frase que nos lleva a la reflexión, a la empatía y al compromiso: “se necesita muy poca energía para batir un huevo y toda la ciencia del mundo no es capaz de recomponerlo”.